Radicado en la Argentina hace dos años, luego de vivir en Estados Unidos durante dos décadas, el hijo del menor de los hermanos Rivero asegura sobre su padre: “Fue el único de los cuatro hijos que se dedicó al tango, le pusieron Edmundo como a mi abuelo y es el más parecido a él físicamente”.

Cantautor, baterista y percusionista, “Pelu” Rivero lleva 30 años de trayectoria y contó en charla con Télam que tocó junto a Charly García, Celeste Caballo, Los Piojos y Alejandro Lerner, entre otros. Acaba de grabar su primer disco solista.

Si bien confesó que lo suyo es el rock y el pop -aunque suma influencias del tango y un poco de jazz-, la vida lo llevó por diferentes rumbos. Viajó por Latinoamérica representando a la Argentina en presentaciones con más de 30 artistas en escena en congresos, convenciones y eventos.

 ¿Cómo vivís el hecho de llevar el nombre de tu abuelo?
Edmundo Rivero: Somos siete nietos, el tuvo cuatro hijos, fallecieron dos. Los únicos que nos dedicamos al arte somos mi hermano y yo. A mí me tocó el nombre, por un lado es un orgullo y por otro lado me siento con una responsabilidad y un peso artístico, con los años aprendí a separarlo y hacer mi camino. Yo me fui a Estados Unidos por una cuestión familiar y volví a mi país con toda esa experiencia. Ahora tenemos ofertas para presentar el espectáculo en Uruguay, Chile, México y en un teatro de Buenos Aires.
¿Sentís la vigencia del arte de tu abuelo?
ER: Me llama la atención especialmente de la gente muy joven, me habla de mi abuelo, es como una usina que se mueve por sinergia propia, es muy lindo ver el cariño de la gente. Te da mucha alegría.