Ciclo de filmes de los años 20 hasta los 90 de ocho países
Amalia: 1914, Argentina

Un recorrido por varias cintas que revelan el pasado y la memoria de la cinematografía regional se verá desde este viernes, en el marco del segundo ciclo de cine restaurado latinoamericano, que organiza la Cinemateca Distrital de Bogotá.
Películas como la argentina «Amalia» de 1914, la mexicana «Tepeyac» de 1917 y la brasileña «Se acabaron los tontos» de 1929 se verán en la muestra que incluye filmes de ocho países latinoamericanos.
Además de esas cintas se podrán ver otros cinco títulos de largometrajes fragmentados e incompletos, de un proyecto titulado «Nitrato argentino», entre los que están un partido entre Porteño y Platense de 1923, y las cintas «Pelota vasca, Club Burzaco» de 1925 y «Entre los hielos de las Islas Orcadas» de 1928.
La muestra también incluye tres producciones de un proyecto del cine colombiano de los años 80 llamado «Yuruparí», divulgado a través de la televisión y que reveló por primera vez la riqueza cultura local en tono etnográfico, en un viaje que avanzó por varias regiones.
Para Paula Villegas, gerente de artes audiovisuales del Instituto Distrital de las Artes (Idartes), el ciclo tiene como «objetivo» proyectar obras «con distintas miradas alrededor del patrimonio audiovisual y resaltar el valor de la memoria que representa cada una de las películas que veremos».
La muestra es gratuita y podrá verse a través del sitio online de Retina Latina (www.retinalatina.org), una plataforma de cine latinoamericano bajo el auspicio y coordinación de los ministerios de cultura, artes o institutos de cine de Bolivia, Colombia, Ecuador, México, Perú y Uruguay.
Otras de las películas que se podrán ver de manera virtual son la cubano-colombiana «Mares de pasión» de 1961, la brasileña «Pixote, la ley del más débil» de 1980, la colombo-venezolana «Mariposas S.A.» de 1986, la boliviana «La nación clandestina» de 1989, y la ecuatoriana «Ratas, ratones y rateros» de 1999.
Este ciclo de cine recuperado y memorioso tendrá, además, una agenda de ocho charlas virtuales relacionadas con los procesos de preservación del material fílmico y con el «valor de la memoria» en la cinematografía, en la voz de expertos y cineastas regionales.
Entre los conversatorios imperdibles está la presentación del proceso de reconstrucción del filme «Se acabaron los tontos» de Luis de Barros de 1929, el primer largometraje sonoro hecho en Brasil, a cargo de los académicos Rafael de Luna Freire y Reinaldo Cardenuto de la Universidad Federal Fluminense (UFF) de Río de Janeiro.