Tokio registra un aumento de casos positivos de coronavirus por séptimo día consecutivo con una confirmación de 534 contagios en las últimas 24 horas, una cifra marcadamente alta en relación de los 146 del sábado pasado, lo que enciende alarmas de cara a los Juegos Olímpicos.
Este es el cuarto día consecutivo en el que el aumento en la capital es superior a 100 pacientes.
El gobierno metropolitano informó que los ingresados en unidades de terapia intensiva con 37, un número estable en comparación con el viernes.
En rueda de prensa, menos de un mes antes del inicio de los Juegos Olímpicos, el ministro de Sanidad, Norihisa Tamura, dijo que no descartaría la imposición de un nuevo estado de emergencia en la capital si el aumento de las infecciones por Covid continuaba en este ritmo.
Es que el número de ciudadanos contagiados -la ciudad se ha beneficiado de la flexibilización de las restricciones desde el 20 de junio- ha comenzado a subir en las últimas semanas.
El ministro recordó que las vacunas aún no han llegado a un gran segmento de la población, y en este sentido puede ser necesario adoptar nuevas medidas para frenar la propagación del virus.
Hasta la fecha, solo el 5,5% de la población de los 126 millones de habitantes de Japón ha sido inmunizado con dos dosis de la vacuna, mientras que el 15,6% ha recibido solo una dosis del suero.
Norihisa aprovechó su rueda de prensa para criticar a los habitantes de Tokio que comenzaron a salir por la noche durante los últimos días del estado de emergencia que expiró el 20 de junio. Este comportamiento podría desembocar en un posible aumento de los contagios en los próximos días, remarcó el ministro.
A su turno, la presidenta de la organización nacional de los Juegos Olímpicos de Tokio, Seiko Hashimoto, pidió a las autoridades nacionales un nuevo endurecimiento de las restricciones en la capital, tras conocerse la aparición de un caso de la temida variante Delta -identificada por primera vez en India- en un ugandés llegado al aeropuerto de Narita y que había estado en «estrecho» contacto con el equipo olímpico del país africano.
Para garantizar la seguridad de los Juegos, los atletas se mantendrán en un ambiente de «burbuja», aunque la propia Hashimoto asumió que las medidas no son necesariamente «100 por ciento» efectivas, según lo reprodujo la agencia de noticias Kyodo.
Hashimoto también advirtió, en eco con las voces de expertos y sanitaristas, que los Juegos Olímpicos podría terminar celebrándose a puertas cerradas si la situación de la pandemia no mejora, aunque por el momento se mantiene la actual limitación del 50 por ciento de la capacidad de las sedes, hasta 10.000 personas, y sin la admisión de visitantes extranjeros.
En tanto, Japón donará un millón de dosis de la vacuna AstraZeneca -no se aplica en su territorio- a cada uno de los gobiernos de Filipinas, Tailandia, Indonesia y Malasia.
Así lo confirmó el canciller japonés, Toshimitsu Motegi, al explicar que el suministro se realizará a partir de la semana que viene, y seguirá las donaciones ya realizadas, por un monto de 2,24 millones de dosis, a Taiwán y Vietnam, durante junio.
El suero AstraZeneca, producido por bajo licencia japonesa y aprobado solo a fines de mayo en Japón, no se usa en el país debido a casos de trombosis en Europa, y se someterá a más pruebas clínicas.
El gobierno de Tokio ha asegurado dosis del suero anglo-sueco para 60 millones de personas, pero Motegi explicó que a partir de mediados de julio el gobierno donará hasta 11 millones de viales a otros países del sudeste asiático a través del programa Covax respaldado por Naciones Unidas.