El escritor italiano Federico Moccia realizó un «Cantiere delle Storie» (Construcción de historias) con la participación de ocho aspirantes a narradores en su nuevo libro «La ragazza di Roma Nord» (La chica de Roma Nord) que se publicará el 5 de diciembre en la editorial Sem de Milán.
«Me gustaba la idea de hacer una novela dentro de la cual pudiera haber muchos hipotéticos escritores de todas las edades que conocí en las numerosas presentaciones de mis libros. Dado que todos escriben pensé: ¿por qué no dar la posibilidad de escribir algo conmigo?», explicó Moccia a ANSA.
La «construcción», que comenzó el 25 de julio, terminará el 31 de octubre. Los participantes deben enviar textos de un máximo de 6000 caracteres que interactuarán con el personaje principal del libro, contando una historia por vez.
«Llegaron muchísimas historias de personas que quieren participar en esta novela. Hay un límite de caracteres, pero una gran voluntad de contar. El criterio con el que serán elegidos estará muy ligado a lo que cuentan. Me gusta la idea de poder diferenciar, de no tener ningún tipo de condicionamiento, ni límite de edad o calidad».
Me gusta la idea de «poder elegir lo que está más en línea con una posible reunión entre mi protagonista, Simone, y uno de los ocho escritores», explicó Moccia al definir su criterio para elegir las historias.
«El relato prevé que el protagonista se encuentre con los coautores en la estación de Santa Maria Novella, donde está buscando a una chica que conoció casualmente en un tren y quisiera volver a ver», contó el autor de «Tres metros sobre el cielo», que se convirtió el film protagonizado por Riccardo Scamarcio y lanzó el fenómeno de los candados de los enamorados.
«A fines de octubre deberíamos decidir los ocho escritores que junto conmigo contarán la historia de ‘La ragazza di Roma Nord'», explicó el narrador, a quien le gusta la idea de hallar dentro de sus novelas las historias de otros. «Creo que habrá un intercambio continuo entre lectores-escritores y escritores que se vuelven lectores», agregó.
El original experimento narrativo se vincula también con el mundo de las redes sociales, «que forman parte de nuestra vida, y a veces también de modo demasiado invasivo. Veo que muchas editoriales toman precisamente a quienes tienen más visibilidad en las redes y los vuelven escritores», explicó.
«Este es un proceso inverso. Es un escritor el que toma a personas que tienen posibilidad de ser conocidas también en las redes. Pero el propio protagonista, Simone, con este cartel que usa en la búsqueda desesperada de la chica de Roma Nord, se vuelve un fenómeno en las redes», precisó.
Moccia espera que la iniciativa pueda ser «un apoyo para ser conocidos, pero sobre todo para tener ganas de seguir escribiendo». «Creo que la escritura es una isla feliz donde cada uno puede contar su propia historia, despegándose de una realidad que a veces le resulta incómoda», concluyó.