Cada vez falta menos para que Beatriz de York y Edoardo Mapelli celebren su anunciada boda. Un día especial para ellos, pero también para sus familiares y amigos, que están citados en el Palacio de Buckingham el 29 de mayo. Esto no sucedía desde la boda de los duques de Cambridge.

Este enlace une a sus dos familias, que mantienen una cordial relación desde hace años. De hecho el padre de Edoardo conoce a Sarah Ferguson desde antes de que esta se casara con el príncipe Andrés y, por tanto, antes de que se convirtiera en madre de quien a partir de mayo será su nuera. A quien, por cierto, todavía no conoce.

Aunque en un principio la relación de Beatriz de York y Edoardo no fue acogida con mucha alegría, pronto demostraron que lo suyo no era flor de un día. Hacía muy poco tiempo que Edo había terminado la relación que mantenía con Dara Huang, madre de su hijo Wolfie, de tres años y con quien se decía que continuaba conviviendo a pesar de la ruptura, cuando comenzó su relación con la princesa Beatriz.

Sin embargo ellos hicieron oídos sordos a las críticas y continuaron con sus caminos y el tiempo ha demostrado que tenían razón. La expareja ha sido capaz de dejar a un lado sus diferencias y han mantenido una excelente relación. De hecho Dara es una de las invitadas a la boda, donde su hijo ejercerá de padrino, el más joven en una boda real.

A pesar de que a simple vista pueda parecer que es Beatriz quien más nobleza aporta a este matrimonio -no por nada es nieta de la Reina Isabel II-, Edoardo no se queda atrás. Ha sido su padre, Alessandro, quien ha confirmado al Daily Mail este detalle, que hasta hace poco se desconocía. «Él es conde», aclaraba su padre al citado medio.

«Su mujer será automáticamente condesa y cualquiera de sus hijos serán condes o nobile donna (mujer noble)». Eso sí, esta distinción es solo simbólica ya que no tiene reconocimiento oficial ni en Italia, de donde es originaria la familia de Edo, ni en Reino Unido, donde la pareja reside.